El Futuro de la República.
Los argentinos vemos con preocupación como la política nacional
se ha convertido en una novela de terror.
El estilo kirchnerista de gobierno se caracteriza por los
altísimos niveles de intolerancia, los ataques permanentes a libertad de
prensa, ataques al libre funcionamiento del Poder Judicial, menosprecio
institucional y retrocesos en las facultades del Parlamento sumados a
niveles preocupantes de corrupción.
El radicalismo debe fortalecerse institucionalmente para ocupar,
una vez más, el rol de garante del sistema republicano en la Argentina.
La política de la chicana permanente, del agravio fácil, no es
la solución a los problemas del país.
La UCR no debe entrar en el juego callejero al que actores del
oficialismo pretenden llevar la discusión política, y mantenerse abocado a
la construcción de una alternativa nacional progresista.
Los principios básicos de esta construcción perseguirán la
recuperación institucional de la República, (vapuleada en el modelo K), y se
sustenta en la confección de un programa de transformación que brinde
garantías de gobernabilidad para los tiempos que vienen.
La UCR de Santa Fe acompañará este proceso.
Más diálogo y menos violencia discursiva son los primeros
elementos a tener en cuenta para el futuro de los argentinos.
Se hace imprescindible la convocatoria a todas las fuerzas
progresistas a construir una opción de gobierno que demuestre que hay otros
modos de ejercer el poder.
Este programa debe contemplar como principal objetivo el combate
frontal contra la pobreza en la Argentina. Los actuales niveles de exclusión
de marginalidad económica, social y cultural no resisten los tiempos de la
disputa política.
Así como en los 80’ la Unión Cívica Radical se constituyó en
unos de los pilares de la recuperación y consolidación democrática; el
desafío para el comienzo del siglo XXI será el de instalar la piedra
fundamental de la Igualdad en la Argentina.
Para lograrlo será indispensable que los partidos políticos
recuperen su rol como rectores en la formación del pensamiento nacional.
No todo se limita a candidatos bien posicionados sin
conocimiento por parte de la ciudadanía de sus ideas, programas o doctrina.
Fortalecer los partidos políticos servirá para dotar al sistema
democrático de un elemento sustantivo a la hora de pensar la Nación y
generar políticas de Estado.
Este es otro aspecto en el cual el modelo kirchnerista está en
deuda con la República.
El radicalismo, como partido nacional que acompañó más de la
mitad de la historia política de la Argentina y la totalidad de la vida
moderna como Nación, reivindica este aporte a la construcción nacional.
La situación de Santa Fe. El futuro del Frente Progresista.
En nuestra provincia la consolidación del Frente Progresista
requiere del esfuerzo de todos.
La coalición debe formalizarse y la normalización institucional
del radicalismo colabora en ese sentido.
Los próximos pasos deberán ser la institucionalización del
Frente como un Frente de Partidos Políticos y no solamente de hombres y
mujeres de diferentes extracciones.
Ello significará llevar adelante formalmente una agenda común,
la que no debe limitarse a los temas electorales sino que implica que las
fuerzas políticas que lo integran participen de la toma de decisiones que
competan a las directrices principales del gobierno de la provincia.
La UCR aporta en ese sentido, no solo funcionarios que provienen
de nuestro partido, sino también sus equipos técnicos que a partir de hoy se
ponen en marcha.
Aún no es tiempo de definiciones electorales, pero la
potenciación de diferentes ofertas posibles dentro del propio Frente
Progresista no debe observarse como una competencia de los partidos
políticos que lo integran; más bien es un valor agregado que la propia
consolidación de esta fuerza podrá exhibir a la sociedad santafesina.
El Frente en su conjunto deberá abocarse a brindar el Programa
que será puesto a consideración de la ciudadanía para los próximos períodos,
así como ajustar las actuales acciones de gobierno a las ideas oportunamente
propuestas.
En esta línea, no puede negarse que la necesidad de
actualización de la Carta Magna Provincial fuera uno de los ejes sobre el
que el Frente Progresista hiciera hincapié en su plataforma política.
La Unión Cívica Radical es desde siempre una fuerza reformista.
Esta vocación reformista ha sido debatida desde el inicio mismo de este
período democrático y a ella siempre adscribimos como partido.
La autonomía municipal, el mejoramiento del sistema legislativo,
mejor Justicia y la modernización de Estado, amén de los institutos que
fueran incorporados en la Reforma Constitucional Nacional del 94, la
extensión en los mandatos comunales, son algunas de las asignaturas
pendientes en la Provincia de Santa Fe.
Mal pueden vincularse estas reformas necesarias a intereses
partidarios o coyunturales de un partido político.
No resultan fundadas las críticas que, desde el Justicialismo,
se efectuaron ante esta posibilidad de cambios.
No pueden colocarse por encima de la defensa de Santa Fe y de
los santafesinos cuestiones que tienen mas que ver con las especulaciones
electorales
La Reforma Constitucional, como instrumento de modernización del
Estado, de efectivización de derechos y garantías y de mejoramiento
institucional no amerita que sea objeto de un debate plagado de
apreciaciones mezquinas.
Santa Fe no lo merece.
Santa Fe, 05 de mayo de 2010.-
Presidente: Julián Galdeano
Vicepresidentes: Juan José Michlig - Mario Migno
Secretarios: Mónica Tomei - Rubén Darío Gres - Edgardo Barberis - Héctor Gregoret - Juan L. Cabrera
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